Con la finalización del año deportivo para Tigre, el Matador deberá reordenar su plantel. Y la defensa, de lo más regular en rendimiento, será un sector clave a reforzar.
Por: Darío Guadalupe
Lógicamente la eliminación temprana de la Liguilla para entrar a alguna Copa el año próximo dejó un sabor amargo en boca de todo el entorno de Tigre. Pero ahora es tiempo de pensar en la siguiente temporada y ver la situación de cada uno de los jugadores.
El primer sector a tratar es el del arco y la defensa. Bajo los tres palos seguirá Javier García, que ya expresó su comodidad en el club, por lo que de no haber ofertas, seguirá siendo uno de los referentes del plantel. El tema a revisar será el de los suplentes. Sebastián D’Angelo tuvo un buen desempeño reemplazando a García cuando se lesionó, pero su deseo de titularidad deja la incógnita.
El lado de la línea defensiva es más complejo. El buen rendimiento de Leandro González Pírez le abriría las puertas a un destino más tentador. De hecho, ya hubo sondeos de Racing por adquirirlo. Además, el hecho de que el pase sea del propio jugador, hace difícil retenerlo. Por el lado de los jugadores del club, Galmarini, Blengio y Godoy seguirían siendo parte del plantel. Los que podrían irse son Ernesto Goñi, que tuvo un rendimiento irregular y los juveniles Bonadío y Pantaleone que tuvieron muchos minutos. Por último, el caso de Mariano Echeverría es una incógnita. Llegó para ser titular y perdío el puesto. Habrá que ver si decide quedarse ante la posible ida de González Pírez o también deja el club.
La defensa de Tigre fue de las menos vulneradas del torneo. Apenas 25 goles en 30 partidos, lo ubican como el quinto equipo con menos goles en contra. Por lo tanto, mantener ésta muralla, será clave, como a lo largo de los últimos tiempo, para una buena campaña.