Omar González, de 44 años, era buscado por la Justicia porque está acusado de matar un amigo tras una partida de cartas en Barracas. Tras permanecer dos años prófugo, terminó cayendo por un hecho fortuito. La Policía de la Ciudad descubrió que se escondía en San Fernando, mientras buscaba a una viuda negra por otra causa.
González, alias "Lolo", de nacionalidad paraguaya, fue detenido en una vivienda ubicada en la calle Santa Rosa al 2200. Estaba prófugo desde el 30 de agosto del 2020, cuando fue acusado de asesinar de tres disparos a Marcos Antonio Moreira en el interior de una vivienda de la Manzana 19 del barrio Zavaleta de Barracas.
El crimen ocurrió luego de que un grupo de vecinos disputó una partida de cartas, que tenía como regla pagar 100 pesos en caso de perder.
El acusado, que había ido con su hermano, perdió. Y en ese contexto, agredió a algunos de los asistentes y se retiró. Pero su enojo no quedó allí. Según la acusación en su contra, regresó cuando había quedado Moreira solo en el lugar y le disparó tres tiros que le provocaron la muerte.
Tras dos años del hecho, y en el marco de un allanamiento por otra causa en el barrio Zavaleta, se tomó conocimiento de que González se encontraba oculto en una vivienda en San Fernando.
Fue entonces que se informó al Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 44, a cargo de Marcos Andrés Fernández, quien solicitó al Juzgado de Garantías 3 de San Isidro, con jurisdicción en esa zona, que se le permita a la Brigada de Investigaciones Comunales 4 realizar tareas de campo para dar con el sospechoso.
Los agentes de la Policía de la Ciudad comenzaron con las tareas investigativas, que incluyeron la instalación de cámaras de seguridad para observar los movimientos de González, lo que estuvo a cargo de la División Análisis de Riesgo y Protección de la Superintendencia de Lucha contra el Cibercrimen. Dichas imágenes fueron comparadas con las del perfil personal de la red social Facebook, indicaron las fuentes.
También constataron que el sospechoso utilizaba una campera del seleccionado brasileño de fútbol y un reloj dorado, elementos que los testigos habían descripto que tenía puesto el día del crimen.
Finalmente, el personal de la División Investigaciones Comunales 4, con la colaboración de agentes de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Fernando, detuvieron a González en una habitación del primer piso de una casa sobre la calle Santa Rosa al 2200.
Además, se encontró un recibo de sueldo a nombre del hermano del imputado, que los investigadores presumen que habría sido utilizado para esconder su identidad y evadir a la justicia.
El delincuente fue apresado inmediatamente y trasladado hasta la alcaidía de la Policía de la Ciudad, donde espera las disposiciones judiciales.