Como cada rincón del país, las inmediaciones de la Quinta Presidencial de Olivos fueron otro punto de festejo y desahogo luego de la victoria de la Selección Argentina frente a Croacia, que la depositó en la final de la Copa del Mundo Qatar 2022. Banderas flameando al compás del viento, niños subidos sobre los hombros de los adultos y cánticos por doquier, se pudieron ver sobre la avenida Maipú, en Vicente López.
El tránsito, como se preveía, intenso y ruidoso, a puro bocinazo. Entre esos vehículos que se paseaban por la avenida había un uno de gran porte, de color celeste y que llamó la atención de los presentes. Era un colectivo, pero no un colectivo cualquiera. Era "La Scaloneta", conducida por un grupo de jóvenes de Vicente López que no estaban para nada ajenos a la fiesta que significó el pase a la instancia final.
Los creadores de "La Scaloneta" son Ignacio González Wang, de 22 años, y su padre, Christian González Wang, quienes convirtieron un colectivo Mercedes Benz modelo 1114 que funcionaba como el vehículo de auxilio en la empresa familiar de micros de larga distancia, en un divertido y ya característico condimento que desde hace tiempo los argentinos vienen empleando al referirse al equipo albiceleste comandado por Lionel Scaloni.
“Lo compramos en un chatarrero y lo pintamos de celeste por pura casualidad porque era la pintura más barata. Lo remodelamos, mi abuelo nos ayudó con la mecánica y quedó prolijo, pero era un colectivo de auxilio, nunca habíamos pensado en La Scaloneta hasta ahora”, dijo el joven Ignacio en diálogo con La Nación.
Tanto Nacho como sus amigos festejaron por primera vez a bordo del particular vehículo el pasado viernes 9 de diciembre, bajo una intensa lluvia que cayó en cada esquina del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), después de lo que había sido la increíble victoria de Argentina ante Países Bajos por penales, y que le brindó la posibilidad de meterse en semifinales a la espera del conjunto croata que venía de dejar en el camino al temido Brasil.
Sin embargo, el martes, tras la goleada 3 a 0, "La Scaloneta" tuvo su gran recorrido. “La idea era salir a dar unas vueltas con mis compañeros de fútbol, pasarla bien y alentar, pero se vivió algo mucho más grande. El contacto con la gente fue algo muy lindo, había mucha alegría y nos agradecían”, manifestó Ignacio.
Uno que también celebró a bordo del colectivo fue Tomás, otro amigo de Ignacio, quien dio detalles acerca de la experiencia: “Pasamos por la Quinta de Olivos, por Puente Saavedra, por la avenida Santa Fe y Alvear, en Martínez, y en todos lados había mucha buena onda. Los agentes de tránsito nos alentaban tocando el silbato, la gente nos pedía sacarse fotos y hasta nos preguntaba cuánto salía subirse”.
“La locura era total. Primero llegamos a la Quinta de Olivos y estaba todo vallado, pero la gente nos vio, empezó a gritar y la Policía nos terminó abriendo. La gente nos gritaba y cantaba lo que cantábamos nosotros. Yo nunca viví algo así en toda mi vida, había un clima de unión que pocas veces viví, todos tirando para el mismo lado y abrazándonos aunque no nos conocíamos”, dijo Federico, otro privilegiado en subirse al vehículo.
La Albiceleste disputará la final del Mundial este domingo 18 de diciembre a partir de las 12 horas (hora argentina). El rival será Francia, la última campeona y que viene de despachar a Marruecos. Va a ser difícil, nadie lo niega, pero este equipo ya ha demostrado que tiene argumentos de sobra para soñar con lo más grande y fue el que le devolvió la ilusión a todo un país, que en este momento está más subido que nunca a "La Scaloneta".
