Cromañón el 30 de diciembre del 2004 y Fernando Báez Sosa el 18 de enero del 2020. Ambos sucesos tienen claras características que los conectan entre sí. Primero y principal, los dos casos tomaron una fuerte repercusión nacional y conmocionaron a todo el largo y ancho de la República Argentina. También tienen el mismo contexto: la noche, esa franja horaria del viernes o sábado que tanta incertidumbre genera en los padres cuando sus hijos salen.
Es en ese marco que el espacio político "Futuro San Martín", conducido por el diputado nacional y referente del Movimiento Evita de San Martín, Leonardo Grosso, pretende prevenir la violencia con una ordenanza presentada en el Concejo Deliberante local, buscando hacer hincapié en aquellas violencias correctivas, vinculadas a la orientación sexual y por razones de género, la violencia institucional y las perpetradas por agentes de la seguridad privada de los espacios nocturnos.
"Nocturnidad Segura" es el nombre del proyecto elaborado por el equipo de Grosso, quien dio a conocer la iniciativa a vecinos del distrito desde el "Club de la Música", un espacio que nació hace ocho años y que se posicionó como uno de los lugares a tener en consideración a la hora de salir a comer y tomar algo por el centro de la localidad de Villa Ballester.
La idea comenzó a gestarse en el año 2014, a raíz del femicidio de Melina Romero, desaparecida a la salida del reconocido boliche Chankanab y hallada sin vida un mes después en un predio cercano al Ceamse de José León Suárez, pero terminó de condensarse con el asesinato de Fernando Báez Sosa en la ciudad costera de Villa Gesell, y cuyo caso se resolvió días atrás con la condena que recibieron los ocho imputados.
Según explicó Carolina Pedelacq, integrante de Futuro San Martín y concejal del Movimiento Evita, el objetivo general del proyecto es abordar el conjunto de la nocturnidad, construyendo estrategias de cuidado no sólo con el Estado sino también con el sector privado, es decir, con los bares y boliches de la zona.
En ese sentido, se busca que los establecimientos tengan un protocolo de acción en relación a los consumos y a la seguridad propiamente dicha, y que el personal que trabaja en esos espacios se formen en la materia y sean una pieza fundamental en el programa. También se prevén acciones de difusión callejeras acerca de los derechos que tienen las personas. Entre las propuestas, además, están la creación de un mapeo interactivo de espacios, un sistema de señalización unificado y campañas de difusión informativa.
Durante la presentación del proyecto, Grosso, quien estuvo acompañado por el diputado Eduardo Toniolli (impulsor de una propuesta similar a nivel nacional), se refirió a los casos más resonantes de asesinatos en el marco de la nocturnidad y puntualizó en generar una serie de acciones que contribuyan en evitar esas situaciones. "Históricamente San Martín es un lugar donde hay nocturnidad. Y a pesar de las cosas que pasaron, como lo de Melina Romero, el Estado no construye", manifestó el diputado nacional.
"Nos parece central impulsar esta discusión para correr de eje todo lo que viene discutiendo el mercado. Discutir lo de Fernando a partir de la condena a los rugbiers es no discutir qué pasa con la nocturnidad, cómo se regula y cuál es la responsabilidad del Estado y nuestra como comunidad", sostuvo el precandidato a intendente del distrito de cara a las elecciones que se llevarán a cabo en el corriente año.
En ese aspecto, aseveró: "Lo que nosotros planteamos en esta ordenanza es que haya política pública alrededor de este tema, que se ponga arriba de la mesa no sólo esta discusión sino las experiencias de organización para contrarrestar estas situaciones de violencia y de consumos excesivos".
Grosso, a la vez, dijo que "lamentablemente San Martín es un pedazo de la zona donde hace un año se murieron 24 personas por consumir cocaína adulterada", y cuestionó que frente a ello no hubo respuesta por parte del Estado: "No se inauguraron el doble de centros de atención para el consumo problemático ni se construyó ninguna estrategia". En cambio, destacó que "nosotros sí construimos en esos días con una estrategia de reducción de daño ante la desesperación", que constó en alertar para que no se compre esa sustancia.
