Se realizará una marcha a 6 años de la Masacre de La Cárcova

Será mañana desde las 17.30 horas en la Estación José León Suárez, en el partido de San Martín. Durante la movilzación se plantará un Olivo de la Paz, y se pedirá que no se baje la edad de imputabilidad.

Pasaron 6 años desde que  la Policía Bonaerense asesinó a los adolescentes Mauricio Ramos y Franco Almirón, e hirió de gravedad a Joaquín Romero, después del descarrilamiento de un tren al fondo del barrio La Cárcova, en José León Suárez, partido de San Martín.

En conmemoración a este hecho y bajo el reclamo de justicia los vecinos del barrio, familiares y amigos de las víctimas, organizarán una caminata el viernes 3 de febrero desde las 17.30 horas.

En una primera instancia, se concentrará en la Estación de J. L. Suárez y se marchará hasta el lugar donde mataron a los jóvenes. Se plantará un Olivo por la paz, con una misa encabezada por el Padre Pepe, acompañado por el premio Nobel de la Paz, A. Pérez Esquivel, y referentes políticos. 

Además, en la puerta de la Comisaría 4ta se denunciará la responsabilidad de las fuerzas policiales en este hecho y se pedirá que no se baje la edad de imputabilidad.

Una segunda parada será en la Plaza de los Trabajadores, donde se destacará que Mauricio y Franco eran trabajadores de la economía popular. "La represión a los vendedores callejeros, manteros, feriantes, campesinos, comparte la matriz que ejerció la Policía Bonaerense aquel 3 de Febrero: Los pibes asesinados eran "quemeros" que subsistían del reciclaje y recuperación de los residuos del CEAMSE", dijeron desde la organización de la marcha. 

El propio barrio fue central en el armado de una estrategia para impedir que se oculten pruebas, y se construya una historia judicial falsa, que garantizara la impunidad de los policías que actuaron en el marco de un operativo comandado por la Bonaerense.

 

El Juicio

En el Juicio Oral, que tuvo lugar hace 3 años, en febrero y marzo de 2014,  los jueces Gustavo Garibaldi, Mónica Carreira y María del Carmen Castro decidieron por unanimidad absolver por “el beneficio de la duda” al policía Gustavo Rey, acusado por el doble homicidio. Condenaron a Gustavo Vega, por los escopetazos contra el sobreviviente, a 7 años y medio de prisión, considerando que no debía agravarse la pena por ser un funcionario público en ejercicio de sus funciones.

Hace ya dos años, la Sala 2 de la Cámara de apelaciones bonaerense anuló la absolución de Rey, porque consideró que había prueba suficiente para condenarlo. Apartaron al Tribunal, y dispusieron que sean otros jueces los que celebren un nuevo debate oral. Respecto de Vega, la Cámara confirmó la condena por homicidio en grado de tentativa, y le aplicó el agravante por “abuso en ejercicio de funciones”, tal como habían pedido oportunamente la fiscalía y la querella, y llamó a que se realice una audiencia con todas las partes involucradas para definir en cuánto se aumentará la pena (estipulada entre los 12 y 19 años).

Según se afirmó desde la querella, Rey disparó luego de que el agente Aguirre disparara una bomba de gas pimienta contra una pila de chapas. Allí se estaba protegiendo de la represión un grupo de muchachos del barrio, entre ellos Franco y Mauricio. Ahogados por el humo, todos debieron pararse, e intentaron correr. Los que se salvaron de la balacera vieron caer a dos de sus amigos, y fueron testigos centrales en el Juicio Oral.

Entre los sobrevivientes se encuentra Joaquín Romero, que como sus amigos fue atacado brutalmente, aunque en otra situación, instantes antes. También él estaba tratando de escapar del tumulto, cuando vio al agente Vega, instructor de tiro y policía experimentado, que se le apareció de entre los pastos, y le dio una orden: “¡Corré!”. Hizo caso, sin embargo Rey le disparó de todas maneras.

Para avanzar en la responsabilidad de la Policía Bonaerense, los mismos abogados que representan a los particulares damnificados, Federico Efrón, del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), y Juan Carlos García Dietze, también impulsan una segunda causa, en el marco de la cual ya fueron citados a declarar dos policías cuyos testimonios apuntan a dilucidar las responsabilidades institucionales.