El director técnico del seleccionado argentino de futsal, Matías Lucuix, aseguró que el equipo no se puede "reprochar nada" después de perder la final del Mundial de Lituania ante Portugal y no poder revalidar el título.
"No nos podemos reprochar nada. Si perdés de esta manera hay que irse con la cabeza en alto. Esperamos tener revancha dentro de tres años", expresó Lucuix en declaraciones a la transmisión oficial.
El seleccionado nacional perdió 2 a 1 ante Portugal, que se consagró por primera vez campeón del Mundo de futsal en una emocionante y polémica final disputada en el Kaunas Arena de Lituania.
El joven entrenador argentino lamentó que los árbitros del encuentro no se hicieron "cargo" en jugadas clave del partido como la mano en el área de Joao Matos que no fue cobrada a pesar de ser revisada en el soporte de video.
LA HISTORIA DE MATÍAS LUCUIX:
Muy llamativo resulta ver a un director técnico que apenas tiene 35 años, pero lo que le ocurrió al sanfernandino tiene su explicación, dolorosa por cierto. Transitaba por una brillante carrera como jugador de futsal, se originó en River Plate, emigró a España a los 21 y sus excelentes actuaciones lo depositaron en el Mundial de Tailandia 2012, donde en una jugada infortuita en el partido de la selección contra Australia, sufrió una triple fractura en el peroné número 3.
Pese a que en un comienzo (después de su visita por el quirófano donde el médico le colocó dos placas y veinte tornillos) reinaba el optimismo y sus ganas de recuperarse y sortear la durísima lesión para así regresar a las canchas, Lucuix padeció de una serie de recaídas que en noviembre del 2015 le determinaron tomar la indeclinable decisión de retirarse para siempre de las canchas, al menos como futbolista.
Sí, como futbolista, ya que su destino estaría abocado tiempo después a la dirección técnica. El ´Messi del fútbol sala´, como se lo identificaba en su etapa como jugador, tomó diferentes cursos de preparación, en los cuales en uno de ellos se cruzó con Diego Giustozzi, quien le ofreció convertirse en ayudante de campo de la Selección Argentina de futsal y encargarse también de la Sub 19 nacional.
Años más tarde, a mediados del 2018, el alejamiento de Giustozzi de la dirección técnica argentina provocó que, en efecto, el encargado de manejar los destinos del primer equipo y de clasificarlo al Mundial de Lituania sea el propio sanfernandino.
Con algunos baches en el camino, pero el combinado argentino logró sacar el pasaporte para la cita mundialista, en la que le tocó integrar el Grupo F y despachar a Estados Unidos (11-0), a Serbia (4-2) y a Irán (2-1). En octavos sacó del camino a Paraguay (6-1), en cuartos a Rusia por penales tras igualar en uno y en la semifinal, nada más ni nada menos, a Brasil, venciéndolo memorablemente por 2 a 1 en el clásico.
Así, la Argentina accedió a la final frente a la Selección de Portugal, con quien lamentablemente cayó por 2 a 1 y no pudo consagrarse por segunda ocasión consecutiva, luego de que en 2016 se haya quedado con la copa al vencer a Rusia por 5 a 4.
