Tras tres jornadas con fuertes descensos, Wall Street rebotó con fuerza y eso incluye a Nasdaq, el índice bursátil de tecnología más popular del mundo. Nasdaq ha protagonizado en los últimos días varias noticias de economía ya que se hablaba de un mini-crash o de la famosa teoría de la ballena.
Sin embargo, el índice que reúne las empresas tecnológicas más importantes de Estados Unidos ha rebotado con fuerza y le ha dado pistas de recuperación a muchos. No es momento de entrar en pánico, los dividendos de empresas tecnológicas aún son una vía excelente para los inversores, al igual que las acciones, las opciones y los CFDs.
La sesión del 9 de septiembre Nasdaq subió un 2.96% lo que genera alivio en aquellos que mantenían inversiones en las compañías de este índice. Pero, ¿exactamente qué causó el pánico? ¿De qué se trata la teoría de la ballena? ‘
La excesiva compra de acciones en el sector tecnológico
La razón del fuerte retroceso de Nasdaq y de que todos los inversionistas se jalaran los pelos al ver como uno de los índices bursátiles más estables descendiera se debe al volumen de compra (call). Cuando se generan un enorme número de lotes de compra en un mercado, el ratio “put/call” alcanza un nivel bajo, en este caso el más bajo en la última década.
Se señala a Softbank como el responsable de la maniobra, básicamente ejecutaron opciones de compra con un valor de casi 4.000 millones de dólares en acciones tecnológicas como las de Microsoft, Tesla, Netflix y Amazon.
No obstante, también hay que echarle el ojo a las compra de valores individuales estadounidenses, que llegaron a 335.000 millones de dólares al día, rompiendo el máximo histórico en tan solo las primeras semanas de septiembre.
Para Ken Polcari, director de inversión de Slate Stone Wealth, comentó que “Las valoraciones eran demasiado elevadas y las nuevas estrategias complejas de derivados por muchos inversores retail así como Softbank, han llevado a Apple, Alphabet, Amazon, Facebook y Microsoft a arrastrar los índices desde máximos”.
La llamada maniobra de la ballena por parte de los compradores ha llevado a que una compañía como Tesla se desplomase un 16% en la semana del nueve de septiembre. No obstante, esta compañía aún se mantiene sobre el 30% en el que se encontraba cuando comenzaron los rumores de su inclusión en el S&P 500, cosa que ya no podrá ser tras la decisión del comité del Dow Jones Indices.
Nasdaq: ¿Vulnerable o fuerte?
Los principales índice rebotaron, siendo el Nasdaq el líder, que intenta poner el freno a su peor racha bajista desde marzo de este año (el inicio del COVID-19 en Estados Unidos). Actualmente el índice se encuentra en los 10.300 puntos, ¿es esta una caída catastrófica?
Joan Cabrero, asesor de Ecotrader, aseveró que “A corto plazo no descartamos que la fortaleza del fondo del Nasdaq 100...pero mucho nos tememos ya que no será de marcar nuevos altos históricos y es probable que forme parte de una consolidación más amplia que podría incluso llevar al índice a corregir hacia los 10.300 puntos”.
Muchos inversores están buscando cuidar sus inversiones en tecnología, algunos expertos anuncian que el temor es notable y se refleja en el conocido “índice del miedo” o VIX, que es el indicador de volatilidad y que ha marcado máximos en los 38 y 28, niveles que no se veían desde junio.
En el Nasdaq aún no se ha producido una sana corrección, la recogida de beneficios natural tras avances sostenido, es momento de que se pague la cuenta. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que este bajón coincide con la recuperación de otros valores en el sector financiero.
Esta caída tecnológica dio un duro golpe al valor de la bolsa de Tokio, que perdió unos 9.000 millones en capitalización.
Sin embargo, no todo es negativo. Es probable que al salir la vacuna del Covid-19 el índice de Nasad tome un repunte, por lo que se esperan que los próximos tres meses sean de recuperación. Este es un índice que tiene una gran capacidad de recuperación y no hace falta ser experto para entender que las compañías tecnológicas aún tienen mucha tela que cortar.