Luego de la realización de la Asamblea del Consejo Federal de Educación, se aprobaron las medidas sanitarias que deberán tomarse en cuenta para el retorno de las clases presenciales en las 24 jurisdicciones de todo el país y que permitirá a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires elaborar planes progresivos para contener la situación epidemiológica en los establecimientos.
Entre las nuevas medidas para volver a las aulas, luego de más de 110 días sin clases presenciales, se propuso un sistema "bimodal" que alternará la enseñanza presencial y a distancia y dos nuevos modelos de aula que plantearán la división de alumnos por grupos o el "aula burbuja" lo cual quiebra el formato tradicional vigente desde principios del siglo pasado.
Las clases en la modalidad virtual y en la presencial seguirán vigentes en forma simultánea y serán las autoridades educativas de cada provincia y de cada escuela los que determinarán el aprendizaje de contenidos a distancia y la incorporación paulatina de grados en función de la evolución epidemiológica de la pandemia. Además se propone dar prioridad al ingreso de aquellos alumnos que estén en el último año de la escuela secundaria y del nivel primario.
El ministro de Educación Nicolás Trotta, que presidió la reunión, afirmó que "la realidad de la circulación del Covid-19 en el país es muy diversa, por eso sostenemos la importancia de la construcción de consensos ayudando a contener y derribar los lógicos temores que pueden tener nuestras familias, docentes y estudiantes”.
Por otra parte, se establece que cada provincia determine un nuevo modelo de aula a fin de garantizar el espacio físico de 1,5 metros de distancia entre los alumnos y el docente. En este sentido cada escuela podrá optar por dividir a los alumnos de cada grado o año por grupos, alternando la presencialidad con la enseñanza virtual, o disponer de una "aula burbuja" en la cual el docente se sitúe en el centro y los alumnos agrupados hacia los costados o en su defecto en zig-zag con el escritorio del docente en uno de los extremos. Esta nueva forma de disposición de los alumnos en las aulas rompe el formato tradicional de los pupitres colocados en fila que imperaba en la escuela desde principios del siglo pasado.
En cuanto a los ingresos, los mismos serán escalonados según el criterio de cada director y en función del transporte. Respecto a este punto, cada escuela deberá organizar el ingreso de los alumnos por fuera de los horarios pico del transporte, por lo que la jornada escolar será reducida, al tiempo que se evitará que en el transporte se crucen alumnos de primario y del secundario.
También se definió una reorganización de los saberes a transmitir en lo que queda del ciclo lectivo y, en este sentido, se priorizará la enseñanza de los Núcleos de Aprendizaje Prioritario (NAP) en el período 2020 y 2021, al tiempo que designará a un docente tutor para aquellas familias que sientan temor de enviar a sus hijos a la escuela o cuyos alumnos deben intensificar su aprendizaje.
Además, quedó abierta la posibilidad de que cada jurisdicción implemente "Escuelas de Verano", y así habilitar edificios complementarios para uso educativo y llevar un registro de aquellas organizaciones de la sociedad civil que quieran ceder sus espacios.
Otra resolución adoptada por los ministros en el marco del CFE fue la de mantener los días de clases y el receso invernal y de verano previsto en el calendario escolar vigente. Aunque en este sentido, se apuntó a que "sólo de ser necesario se extenderán los ciclos lectivos en los grados o años que lo requieran".
También se dispuso que estarán exentos de asistir a la escuela las personas mayores de 60 años "excepto que sean considerados personal esencial para el adecuado funcionamiento del establecimiento”, así como también las embarazadas, personas con enfermedades respiratorias crónicas, cardiovasculares y otros trastornos respiratorios.
Para que cada escuela abra sus puertas deberá haber acondicionado previamente una sala en la cual aislar a aquella persona que presente síntomas compatibles por Covid-19, mientras que deberán adecuarse los mecanismos para conectarse con los sistemas de salud.
Además, cada jurisdicción podrá construir reglamentaciones propias complementarias. Para ello, las provincias deberán presentar un Plan Jurisdiccional de retorno a clases presenciales ante el Ministerio de Educación de la Nación, que deberá contemplar en su organización y alcances, lo establecido en el documento acordado y tener la aprobación de las máximas autoridades educativas y sanitarias de cada jurisdicción.
Otras medidas puntuales que se definieron, fueron:
- Se permitirá la permanencia de personas hasta 15 minutos en lugares cerrados, no se podrá compartir ningún elemento personal ni de protección y todos deberán limpiar sus celulares con alcohol al momento de ingresar a la escuela.
- Las autoridades de cada escuela deberán colocar a señalización y cartelería adecuada para comunicar medidas de seguridad generales y específicas según el tipo de actividad.
- Se prohibirán eventos o reuniones dentro de los establecimientos, incluyendo patios o sectores de juego, salvo juegos que conserven la distancia, y se debe señalizar en el suelo la distancia de seguridad para organizar las filas o grupos.
- En cuanto al personal encargado de repartir viandas, deberán adoptar "nuevas prácticas en manipulación de alimentos", las escuelas deberán tener "ventilación natural", por lo que las puertas y ventanas tendrán que estar abiertas cada 90 minutos.
- Los ascensores instalados en cada escuela sólo deberán ser utilizados para personas con dificultad de movilidad respetando el distanciamiento dentro de la cabina.
- Se recomendó "reducir al mínimo el traslado de elementos entre casa y escuela (como mochilas y juguetes) y, si se llevan, deben dejarse fuera del aula".