El Obispo de San Isidro convocó a los medios locales por el día del periodista y manifestó la necesidad de una prensa que ayude a pensar el país en prospectiva. También expresó su preocupación por las “nuevas formas de pobreza”.
El pasado viernes, el Obispo de San Isidro Monseñor Oscar Ojea realizó un encuentro con periodistas de medios locales con motivo de día del periodista.
Al referirse a la labor periodística el Obispo expresó: “valoro cada vez mas esta vocación periodística, es inquietud interior que hay detrás del corazón de cada periodista para poder desaparecer un poco ellos y hacer aparecer aquello que es noticia”.
Consultado por Que Pasa sobre el momento actual del periodismo Ojea señaló: “es muy importante la actividad periodística para ayudar a pensar. Para poder mirar hacia adelante y hacer prospectiva en el país. Y pensar el país en término de sentido y hacia adelante. Y creo que muchas circunstancias nos llevan a hablar de lo inmediato y dentro de lo inmediato a jugar un partido, ser de River o de Boca, y esto cansa bastante, cansa el pensamiento. Yo veo al periodismo en un momento de hacer opciones: entra en una dinámica de servicio a la verdad o repite lo mismo. Tenemos libertad de expresión y tenemos que usarla. Tenemos que servir al país en esto. Y me parece que el mejor modo de servir a la verdad es generar una reflexión que pueda mirar a la patria hacia adelante.“
Finalmente, el Obispo de San Isidro se refirió a la situación social: “nosotros estamos muy preocupados por las nuevas pobrezas. Y entendemos por nuevas pobrezas, aquellas formas de vida que han adquirido mucha virulencia, especialmente en los últimos 20 años, y transformando la realidad social. Las adicciones han traído muchísimas dificultades, entre otras una violencia mayor. Y la violencia en una forma de pobreza. Nosotros nos encontramos también por la trata de personas, que es consecuencia de lo mismo, y es una nueva forma de pobreza. La forma como se perjudica el medio ambiente, y eso va creciendo gradualmente, también va creando nuevas formas de pobrezas. La pobreza, entonces, se presenta con un ropaje que para nosotros es nuevo. No porque esté lejos de la humanidad. Es profundamente humana y conlleva muchos déficit juntos, que se tocan unos con otros. Y se hace necesario un modo de abordaje global al problema, que tiene más que ver con el sentido de la vida que con la carencia de esto o lo otro. El problema de la inclusión social, tiene que ver con un tema de educación, tiene que ver con un tema de salud, pero hay que encararlo de un modo global, se toca uno con otro.”