En el marco de los festejos por las fiestas y a partir de una denuncia, en Tigre se decomisó y posteriormente se clausuró un local que comercializaba explosivos.
El lugar se encontraba ubicado en el paseo comercial de Troncos del Talar. También hubo controles en distintos puntos del partido. Una ordenanza municipal regula el uso de la pirotecnia sonora en el distrito.
Se realizó un trabajo conjunto, con la participación de la Subsecretaría de Control Urbano del gobierno local y las direcciones de Explosivos del Ministerio de Seguridad provincial y de Bomberos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
Como resultado se clausuró el conteiner que funcionaba como puesto de venta y se decomisaron 10 bultos con pirotecnia a granel.
Por otro lado, también hubo controles en domicilios particulares y comercios de distintas zonas del distrito, que ejercían el comercio ilegal.