Días atrás quedó reglamentada oficialmente una ordenanza que busca proteger a las especies autóctonas de Vicente López y prohíbe la venta, tenencia, caza y persecución de fauna silvestre nativa y exótica. “Hace tres años comenzamos a trabajar en ella, en diciembre de 2017 se aprobó y ahora fue reglamentada para que comience a llevarse adelante”, cuenta Eduardo Emmi, coordinador del Club de Observadores de Aves (COA) de Vicente López, uno de los 127 que hay en todo el país, perteneciente a la ONG Aves Argentinas, impulsores del proyecto.
En la Reserva Ecológica de Vicente López, y de acuerdo a un relevamiento hecho por el COA, hay más de 216 especies de aves silvestres, y esto se amplia en toda la costa del distrito. “Tiene que ver con la biodiversidad de la zona del Río de la Plata, y no estamos hablando solamente de aves autóctonas o exóticas, sino también de otras especies de animales como los coipos, o tortugas, por nombrar algunas de las decenas que hay”, explica Emmi.
Las problemáticas de tráfico más comunes son la tenencia ilegal, la comercialización ilegal y la caza y captura de aves y animales silvestres, y también se dan en el territorio de Vicente López, de ahí la necesidad de poder reglamentar el cese de las mismas y así darle un marco de protección a estas especies. En relación a estas actividades ilícitas, uno de los casos que salió a la luz fue el de una tienda de animales en pleno centro comercial de Munro, donde se encontraron más de 100 especies a la venta.
“La tenencia de este tipo de animales está dentro de la cultura de la gente, no sólo como mascota. Hemos visto muchos casos también de gente cazando en la costa del distrito”, relata Emmi, quien explicó además que las sanciones para aquellos que infrinjan la ordenanza van desde multas económicas que comienzan en los $4 mil pesos, y pueden llegar hasta los $200 mil, hasta clausuras de locales que se dediquen a este tipo de actividad ilícita. Estas sanciones varían de acuerdo a la infracción que se cometa.
“Ahora queda en nosotros hacer que esta ordenanza se cumpla, y que se generen las herramientas para que comiencen a implementarse los mecanismos desde el municipio que permitan llevar adelante estas medidas preventivas. Tenemos una inmensa expectativa, porque creemos que este marco legal puede llevarse no sólo a otros municipios, sino también a diferentes rincones del país”, expresa el coordinador del COA local.
En el caso de la región norte, San Isidro cuenta con su ordenanza desde el año 1982, y San Fernando regularizó esta situación hace un poco más de dos años. Ahora, de acuerdo a lo informado por Emmi, se está tratando que Tigre tenga también su regularización, que va en sintonía en todos los casos con la Ley Nacional de Protección de la Flora y Fauna Silvestre.