La recientemente inaugurada librería Punto de Encuentro en San Isidro (Ituzaingó 112) se colmó de vecinos la tarde del sábado que se acercaron para escuchar al gran historiador, escritor y periodista argentino, Osvaldo Bayer.
"Osvaldo Bayer. Crónicas de Vida" fue escrito por Norberto Urso y cuenta las historias de vida del escritor argentino a lo largo de sus 89 años.
Norberto Pedro Urso es sobreviviente de Mansión Seré, fue secuestrado en su casa de la localidad de Ciudadela el 23 de noviembre de 1977, estuvo detenido desaparecido por haber militado en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES).Todo comenzó cuando Urso publicó un libro sobre la última dictadura argentina y Bayer lo acompañó en distintas presentaciones por el país.
El libro refleja diferentes sucesos que marcaron la vida el escritor. Una travesía literaria a través de episodios donde se toca su niñez, adolescencia, juventud, investigaciones, amarguras, peligros, amenazas y luchas.
“Este libro es mi humilde homenaje a un hombre con un coraje civil indiscutible”.
"En cada una de las presentaciones, almuerzos y desayunos Osvaldo me contaba anécdotas increíbles de su vida. Me llevó nueve años, lo entrevistaba dos veces por año cada vez que volvía de Alemania. Este libro es mi humilde homenaje a un hombre que tiene un coraje civil indiscutible”, expresó Urso.
En tanto, Osvaldo Bayer se refirió al libro y a su trayectoria de vida: “Hay tanto para hablar con 89 años vividos en un país como este. Por mis libros fui encarcelado dos veces y viví en el exilio ocho años. Lo sentí como algo muy injusto, ver cuanta gente estaba presa sin ninguna culpa, principalmente intelectuales que habían cometido el pecado de escribir libros”.
“El de Norberto es un libro hermoso donde me recuerda todos los aspecto de mi vida y también de mi libros. Le dedica mucho espacio al cuarto tomo de la Patagonia Rebelde que estuvo mucho años prohibido y eso me llena de orgullo”, sostuvo Bayer.
Por su parte, su hija, Ana Bayer concluyó con una emotiva anécdota: “Me acuerdo que mi madre siempre decía el día que Osvaldo publicara sus memorias, ella lo iba a corregir. Porque él tiene una memoria increíble, pero en las anécdotas cotidianas las mujeres le damos mayor importancia. Y eso fue lo que le dije a Norberto cuando me contó la idea de hacer el libro. Mi madre ya estaba muy enferma y al mes que efectuó las correcciones falleció. Ella decía que corregirle el libro era como hacer un repaso de su propia vida, le gustó muchísimo”.