Frente a la crecientes situaciones de inseguridad, reiteró su pedido de una policía municipal sin mencionar la desigualdad ni propuestas inclusivas.
“Los intendentes deberíamos ser los jefes de policía de los municipios”, reclamó el jefe comunal de San Isidro, Gustavo Posse, refiriéndose a la necesidad de crear una policía municipal para solucionar el problema de la inseguridad.
En relación al Programa Municipal de Cuidado Comunitario, implementado por el municipio, Posse dijo que “gracias a esta decisión, aún sin tener responsabilidad en la materia, el Municipio cuenta con 120 móviles propios y 920 cámaras de seguridad, además de aportar recursos para comisarías y fiscalías del distrito”. 
En ese sentido afirmó: “Los intendentes debemos ser los Jefes de Policía de cada localidad porque nosotros respondemos a los vecinos. Tenemos que trabajar para que los distintos cuerpos legislativos permitan la creación de las policías municipales”.
Esto se suma a la denuncia realizada en un comunicado oficial acerca de la disminución del personal policial en todos los municipios de Gran Buenos Aires, a la par del aumento de la población y la conflictividad. En ese mismo comunicado el municipio afirmaba que existen los recursos materiales necesarios pero faltan los agentes oficiales, señalando la competencia de las autoridades provinciales y nacionales.
