Como reconocimiento a quien fue uno de los vecinos más queridos de la localidad de Belén de Escobar, presentaron un proyecto de ordenanza para que una calle lleve el nombre de Luisito Civitarese.
Luisito, quien falleció en octubre pasado a los 76 años, era un querido personaje que recorría el casco céntrico del distrito con su carro. Tras su muerte, una multitud lo despidió en las calles golpeando botellas y recordando sus chistes, los sustos que generaba fingiendo chocar a los transeúntes con su carretilla y los ruidos de su bocina. Siempre amigable y dispuesto a ayudar a la comunidad.
La idea surgió de amigos, conocidos y familiares y fue llevada al Honorable Concejo Deliberante por el bloque Cambia Escobar. Propone nominar con el nombre del reconocido vecino a la calle que actualmente se encuentra sin denominación oficial paralela a Peirano y Callao, entre Belgrano y Las Heras, Belen de Escobar.
"En muchas ciudades se reconoce solo a los próceres o gente que es de afuera como presidentes o líderes mundiales y que no tienen que ver con el pueblo, que está bien reconocerlos, pero también a aquellas personas que son menos públicas. Es hacer un reconocimiento a alguien que se brindaba a los vecinos", aseguró a QUE PASA el concejal Diego Castagnaro quien presentó la ordenanza.
Según se puede leer en el proyecto, se considera que "las ciudades, son su pueblo y su gente, sus historias y el recuerdo de los actores que mantienen vivas las mejores acciones y son relatadas por generaciones". En ese sentido, agrega: "Muchos de los escobarenses guardan un grato recuerdo de “Luisito”, quien se ofrecía a diario, a realizar trabajos de recolección de residuos, de emprolijamiento de veredas y frentes, que era parte del folklore urbano, compartir con él su compañía y tener lindas anécdotas de Luisito y sus perros batuke 1, 2 y 3".
Además, recuerda que "se lo veía siempre en Jet Set, el club Italiano, el centro de jubilados ferroviarios, en la fonda de la calle mitre, o en compañía de su amigo Pocho Caña en el kiosco de diarios, donde todos lo invitaban a sentarse a comer y compartir historias de Escobar".
"Podríamos decir que fue el primer recuperador urbano y con su incansable tarea, no solo ayudaba a tener más linda a su ciudad, sino a cultivar miles de amistades, como lo grafica el día de su despedida, en la plaza San Martín de su querida Belen de Escobar", explica el escrito.
Por esas razones, se busca reconocer y homenajear a Luisito para que su memoria quede presente para siempre en el recuerdo de todos los escobarenses.