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Días atrás, al abrir las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, el intendente de San Isidro, Ramón Lanús, se plantó ante la organización del festival Lollapalooza, que todos los años se realiza en el hipódromo y reúne a miles de personas ante reconocidos artistas nacionales e internacionales, ya que sostuvo que el megaevento "es subsidiado por todos los vecinos", asegurando que representaba pérdidas económicas para la comuna.
"El festival Lollapalooza estaba siendo subsidiado por todos los vecinos de San Isidro. En 2023 generó ingresos por $20 millones y gastos por no menos de $60 millones", sostuvo Lanús en su discurso.
Además, dijo que este año se terminarán "el centenar de entradas de cortesía que se entregaban para funcionarios municipales", un hecho que calificó como "un beneficio típico de la casta".
En relación a los ingresos que el festival deja al Municipio, Lanús dijo que buscará que en su edición de este 2024, programada para que se realice del 15 al 17 de marzo, le de al municipio un ingreso 10 veces mayor que el de 2023, es decir "cerca de $200 millones" que "aún ajustado por inflación, es un número muy importante" para la comuna.
En las últimas horas, comenzaron a circular rumores sobre la posibilidad de que el festival no se realice ante la falta del pago de esa suma por parte de la organización. Ante esta situación, desde el Municipio sólo indicaron a QUE PASA que "están en negociaciones".
A una semana de la fecha del evento, que ya confirmó en su grilla a Blink-182 y SZA, Sam Smith, Feid, Arcade Fire y Limp Bizkit, YSY A y Miranda!, entre otros artistas, aún no hay definiciones sobre la realización del festival.
