El Matador arranco presionando y jugando ante un River que venia entonado. Incluso mereció mas en un primer tiempo entretenido en el que ambos se volcaron a la ofensiva y tuvieron sus opciones. Pero en el segundo tiempo llego la polémica y la derrota para los de Sava.
Con el partido sin goles, Morales escapo solo ante la marca de Moreira y definio ante la salida de Batalla. ¿Gol? No, porque Baliño cobró un dudoso empujón previo del volante de Tigre. A los pocos minutos, un rechazo de Godoy le quedo a Galmarini que quiso jugar de cabeza con Ibañez pero la pelota le quedo corta y Driussi aprovecho para abrir el marcador.
No seria todo, porque Tigre no se rindió y a pesar de acusar el golpe, siguió buscando. Y tras una gran jugada de Castro que terminó en centro atrás para que Morales, ahora si, vuelva a definir. ¿Gol? No, porque el línea cobro un inexistente offside. Los de Sava se desmoralizaron y sólo hubo tiempo para un golazo de Mora para ampliar un resultado que ya era inmerecido.
Ahora Tigre debera recargar pilas para encarar los minutos restantes frente a Racing el miércoles