Los vecinos de San Fernando están cada vez más cerca de poder disfrutar el nuevo teatro del paseo cultural Otamendi, cuya obra presenta avances en toda su estructura, ubicado junto al histórico Palacio Belgrano-Otamendi, ya restaurado y utilizado para actividades artísticas.
En el marco de los trabajos edilicios, ya se encuentra concluida la sala principal, con un techo armado con vigas de 20 metros de largo. Asimismo, también se realiza la estructura sobre la cual se instalan las 500 butacas del espacio, las terminaciones de los techos en madera, entre otras construcciones.
El intendente Juan Andreotti visitó el avance de los trabajos, acompañado de la secretaria de Obras Públicas, Cecilia Tucat. “Es una de las obras más importantes que hicimos entre todos, donde faltan ya muy pocos meses para que lo inauguremos. Va a ser un orgullo para nuestra ciudad y va a cambiar la vida cotidiana y nocturna del casco de San Fernando”, expresó el jefe comunal.
“El Teatro Otamendi va a complementar la restauración del Palacio histórico, e integrarán junto a un espacio verde, el Centro Cultural de nuestra ciudad. Beneficiará a la gastronomía y el comercio en el corazón de la ciudad; y también a todos nuestros artistas locales que tendrán la posibilidad de presentarse en estos espacios para que la cultura en San Fernando tome cada día más fuerza”, completó.

Historia del Palacio Otamendi
El edificio es un emblema de San Fernando y su historia se remonta a fines del siglo XIX: fue diseñado entre los años 1860 y 1870 por el arquitecto Joaquín Belgrano Villarino, sobrino bisnieto de Manuel Belgrano, que comenzó con la construcción de lo que sería su vivienda en 1879. El palacio se terminó en 1882.
Luego, en 1903 fue comprado por la familia Otamendi. Rómulo Otamendi vivió allí con su hija Matilde y su esposa hasta mediados de la década del 30, cuando fue donado a la Sociedad de Beneficencia de Buenos Aires, que construyó allí un asilo para niñas huérfanas. El lugar funcionó hasta el 2001, primero en manos de la congregación española de Los Ángeles Custodios y luego con la administración del Estado, a través del Consejo Nacional del Menor y la Familia.
El en lugar, hubo proyectos para hacer una escuela técnica dependiente de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la UBA, y también para crear un espacio para difusión de derechos de niños y adolescentes, pero ninguno de ellos prosperó.
Durante una década estuvo abandonado, y en 2017 sufrió un incendio que afectó gran parte de su estructura. Las solicitudes por parte de la comuna para hacerse cargo del lugar fueron reiteradas, hasta que a principios de 2020 se logró adquirir la custodia y meses más tarde el uso precario del lugar, lo que le permitió comenzar con las obras de restauración que fueron inauguradas recientemente.