Sebastián Galmarini, director del Banco Provincia y referente de Frente Renovador en San Isidro, se refirió la situación del peronismo como oposición al gobierno nacional y expresó la necesidad de "construir una estrategia que no sea funcional" a Javier Milei. Además, cuestionó las políticas económicas, las definió como "viejas recetas que en Argentina no funcionaron" y reinvindicó la figura de Sergio Massa. En el plano local, también esbozó críticas hacia la nueva gestión del intendente Ramón Lanús: "Hace falta una gestión con mayor impulso, que hoy no se está viendo".
En diálogo con QUE PASA, Galmarini analizó los primeros meses del gobierno nacional y manifestó su preocupación "por el resultado de políticas que la Argentina ya vivió". "En todo este proceso de cambio, como lo llama el gobierno, lo único que se ve son viejas recetas que ya no funcionaron: ajuste, caída de la actividad, suba del desempleo, más pobreza, más ajuste, privatizaciones, intentos de reformas laborales. La Argentina no está viviendo nada que no haya pasado a lo largo de la historia", sostuvo y dijo que "hay que pensar en qué cosas la Argentina sí debe tener transformaciones desde la gestión pública, la administración y la toma de decisiones que creo que la Argentina necesita cambiar".
"La Argentina no puede vivir con un déficit insostenible, pero no es lo mismo tomar deuda en un momento donde se te cae el nivel de empleo o te quedaste sin ingreso que cuando los tenés. Uno podría decir que parte del éxito de Sergio Massa como ministro de Economía fue, en un contexto donde se derrumbaron las exportaciones agropecuarias por la sequía, donde la Argentina tenía un gran déficit energético, no sólo lograr sostener un gobierno en las condiciones malas tanto políticas como económicas, sino que además poder llevar adelante algunas acciones que lo muestran pensando en Argentina, por ejemplo terminar el gasoducto", definió Galmarini.
Después, frente a una repregunta sobre la gestión de Massa al frente de la cartera económica, el referente del Frente Renovador matizó: "No es el resultado que hubiéramos querido". "Sergio asumió y a los dos meses tuvo una sequía que impactó en el 30% de los ingresos de dólares que tiene la Argentina a través de las exportaciones agropecuarias. Se enfrentó a una situación muy complicada en medio de un gobierno donde se hablaba de helicóptero, de conflictos internos, de una coalición que no lograba estabilizar hacia adentro la gestión pública y por otro lado con un contexto económico recontra difícil. Sergio terminó tomando decisiones que vistas en el tiempo, más allá de lo que la opinión pública mire, indican que decidió mantener el nivel de la inflación para sostener el nivel de actividad, para que no crezca el desempleo y que no se dispare la pobreza. ¿Podría haber sido de otra manera? Sí. Como está haciendo este gobierno: con un flor de ajuste, un crecimiento del desempleo y con una suba de la pobreza importante", puntualizó Galmarini.
"Más allá de la diferencia que podamos tener con el gobierno, la Argentina necesita construir políticas que atraviesen las gestiones, los gobiernos, políticas de Estado. No podemos vivir de expansión monetaria a restricción monetaria, de abrir escuelas a cerrar escuelas. Es todo muy poco serio y no lo ayuda a Milei a tener éxito en la gestión, que en el fondo es lo que todos queremos, vivir un poco mejor, sino no tiene lógica el gobierno", manifestó el director del Banco Provincia.
"La estrategia de Milei es reconstruir la polarización de buenos y maloS"
Por otra parte, Galmarini analizó el acompañamiento de la gente a la gestión de Javier Milei pese a los números que arrojan el aumento del desempleo y la pobreza. "Hay un rechazo importante a una gestión que no fue buena, que tuvo problemas en la dinámica política de la coalición y que más allá de las explicaciones que uno pueda dar, los resultados no fueron eficientes. La gente tiene razón en estar enojada porque efectivamente no logramos salir de ese enredo. También es cierto que esa evaluación del gobierno anterior no significa que uno no mire lo que está pasando a una parte importante de los argentinos y argentinas en este lapso de tiempo, que es que los familiares empezaron a tener problemas con su empleo, que cayó el nivel de ingresos, que se licuaron las jubilaciones, que hay pérdida de capacidad de compra del salario de los trabajadores. Lo que creo es que lo que más allá de lo que uno puede coyunturalmente evaluar, que pueda decir una encuesta u otra, hay que mirar que la estrategia de Milei es reconstruir la polarización de buenos y malos, blancos y negros y otra vez caer en este péndulo de 'si ustedes estatizaban, yo privatizo'. Me parece que no es ni estatizar ni privatizar, hay que estudiar seriamente", subrayó.
"El criterio privatizador o individualista supone problemas como también los tuvo el criterio estatizador de todo. No se puede estatizar todo. En vez de discutir sobre la estrategia que tiene de polarizar lo que nosotros tenemos que intentar hablarle a los muchos argentinos que lo que quieren es entender qué estamos discutiendo, por qué pasamos de un lado al otro", añadió.
"tanto Moreno como Grabois son altamente funcionales a milei. Hasta me atrevo a decir que no sé si no tienen un acuerdo con el gobierno"
Galmarini aseguró que "pensar hoy la elección del 27 no tiene ningún sentido, falta mucho: en el tránsito a esa elección tenemos que construir una estrategia, una coordinación que no sea funcional a la naturaleza Milei". "En ese sentido, tanto Moreno como Grabois son altamente funcionales. Hasta me atrevo a decir que no sé si no tienen un acuerdo con el gobierno que hasta expresan públicamente y no tan públicamente exactamente lo contrario a lo que la sociedad quiere ver, que es algún grado de moderación, algún grado de autocrítica y les hablan a los que ya estamos convencidos que la privatización y el ajuste no funcionen. Más que una crítica individual es una crítica a la coordinación estratégica de nuestro espacio, de nuestro frente político del peronismo", dijo.
"Gran parte de los funcionarios no conocen San Isidro, no son sanisidrenses"
Sobre el final de la entrevista con QUE PASA, Galmarini se refirió a la situación política en San Isidro luego de la salida del gobierno de Gustavo Posse y la aparición de la figura de Ramón Lanús, actual intendente del distrito. "La gestión de Posse estaba terminada. Había que dar vuelta la página porque estaba estancada, no daba para más. Hubiera querido que el nuevo gobierno tuviera otra dinámica y otra capacidad de construir equipo y mayor éxito en el arranque de su gestión. Tuvo severos problemas en la formación de un equipo. Gran parte de los funcionarios no conocen San Isidro, no son sanisidrenses, que no sería un problema, pero no conocen nuestra idiosincrasia, nuestros problemas, nuestra historia", cuestionó.
"Adicionalmente, tuvieron problemas en la gestión de salud porque los primeros cuatro meses pusieron un ingeniero industrial al frente, a tal punto que hicieron la denuncia penal por una compra a valores más altos de guantes de látex y ellos compraron guantes de látex para tintura de pelo. Entonces tuvimos durante varios meses a los cirujanos con dificultades para operar, para ponerlo en términos claros", señaló el referente del Frente Renovador en San Isidro.
"En materia de Seguridad, lo veo al intendente hablando, preocupado, pero tenemos un secretario que no conoce, que no le está yendo bien, que no puede coordinar los programas municipales ni siquiera con el ministerio provincial y nacional. Vino Patricia Bullrich a recorrer un barrio y al otro día hubo una muerte en una pelea de bandas por el narcotráfico. La cantidad de agentes nacionales, provinciales y municipales sigue siendo la misma. Muchas veces los títulos, el marketing, los videos para las redes están muy bien, pero la gestión son horas culo: sentado, mirando barrio por barrio, lugar por lugar, tema por tema y no alcanza con el 'masomenismo'", apuntó y agregó: "A pesar de esta dinámica de sesgo que se reproduce por todos lados, la responsabilidad que uno tiene a la hora de gobernar es la de sentarse, ser serio, ser riguroso, estudioso. Después uno puede hacer la payasada que quiera en las redes, pero cuando tiene que tomar decisiones tiene que estar mirando que eso afecta la vida de los vecinos. En el caso de San Isidro, no le están encontrando el agujero al mate y eso es un problema".
"Nosotros siempre tenemos una posición constructiva. Entiendo que en el Concejo Deliberante, Federico Meca y Estefanía Rivadulla (concejales del Frente Renovador) han tenido y llevado propuestas, tanto en la fiscal e impositiva, el presupuesto y en distintas materias. Siempre estamos dispuestos a charlar y ayudar, aportar nuestra mirada, más allá de diferencias o matices que podamos tener en las prioridades de la gestión de gobierno. Siempre intentaremos ayudar para que a San Isidro le vaya bien. Descarto que no es fácil hacerse cargo de un Municipio, uno podría fallar en el intento de hacer más de lo que ya tenía, es extraño que esté pasando con cosas que en el Municipio estaban medianamente resueltas. Por ejemplo, se vio en la tormenta de fin del año pasado las dificultades que hubo para ordenar el espacio público, para levantar árboles, ramas, cortes de pasto, la limpieza de las localidades. Hace falta una gestión con mucho mayor impulso, hoy no se está viendo", culminó.