Tigre ya comenzó a delinear el primer semestre del 2020 que lo encontrará jugando la tan codiciada Copa Libertadores de América, codeándose con los grandes del continente, pero a la vez, disputando la segunda división del fútbol argentino, y con el objetivo de recuperar un lugar entre los mejores del fútbol local en la futura Superliga.
Para esto, la dirigencia tomó nota de lo que sintió el equipo las ausencia de los jugadores salientes, en especial, la delantera del equipo campeón, con Gonzalez y Janson. Los refuerzos, salvo algunas apariciones de Dening, estuvieron lejos del nivel de los salientes, y el equipo de Victoria estuvo falto de peso ofensivo, ante rivales que, en su gran mayoría, le regalaban la pelota y se cerraban en el fondo.
Por esto, son delanteros los primeros objetivos a la hora de pensar en refuerzos para Tigre. Y los nombres son de peso: Mariano Pavone, actualmente en Quilmes, y de gran trayectoria en el fútbol argentino; y Juan Ignacio Cavallaro, integrante del plantel campeón en Tigre, con importantes apariciones a pesar de no ser titular, podría regresar tras su paso por Unión este último semestre.
“El interés por Mariano Pavone y Juani Cavallaro son ciertos, pero no son los únicos dos que estamos viendo. Hay 3 cupos para incorporar en el Nacional y 2 cupos para la Copa Libertadores. Vamos a poner todos los cartuchos en traer esos 3 fuerzas de jerarquía. Después, si nos queda algo, apuntaremos a traer algún jugador solo para la copa. Pero de antemano la idea es traer los 3 refuerzos para el torneo, el objetivo principal es ascender” aseguró el recientemente reelegido como presidente de la institución, Ezequiel Melaraña.