Tigre perdió 4-0 ante Racing Club en Victoria, en el partido correspondiente a la tercera fecha de la Liga Profesional de Fútbol (LPF). Noche para el olvido para el Matador, que se hunde en el fondo de la tabla general.
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Con el mismo equipo que jugó ante Central, Tigre buscó repetir la fórmula e imponerle condiciones a Racing, pero no pudo y de entrada el visitante se puso en ventaja por intermedio de Martirena.
La espalda de Ortega era una tentación para la Academia y por ahí llegaban casi todos los ataques. Tigre tenía mucho la pelota en su campo pero era inofensivo cruzando la mitad de la cancha, por eso costaba vulnerar a la defensa de Racing. Mucha imprecisión y nerviosismo.
En el tramo final de la primera parte, el Matador mostró algo de ímpetu pero apenas pudo hacer algo con eso. Para colmo, Adrián Martínez puso el 2-0 en la última del primer tiempo y fue un baldazo de agua fría.
El gol de Martínez hizo que Tigre se derrumbara anímicamente. En el arranque del complemento, Racing estampó el 3-0 con una jugada maravillosa de Salas y liquidó el partido. El Matador fue un equipo vencido todo el segundo tiempo y deambuló por la cancha.
A tal punto de que iban 30 minutos y Arias no tuvo que ni siquiera revolcarse en el área. Ya estaban en cancha Londoño y Forclaz pero nada pudieron hacer en un equipo apático, débil y sin una sola idea de cómo generar una jugada de peligro.
Juanfer estampó el 4-0 de penal tras una falta de Lomónaco y partido terminado. Tigre simplemente intentó que no le hicieran más goles y el VAR lo salvó de que Roger Martínez pusiera el 5-0.
Tigre sigue último con cinco puntos y en la próxima fecha enfrentará a River en el Monumental.
