Técnico que debuta gana, reza uno de los proverbios más conocidos para los futboleros. Y así fue para Tigre, que con Lucas Pusineri en su primer partido como DT, venció por 1 a 0 a Boca en La Bombonera, en un partido que empuja anímicamente para lo que viene. El gol lo hizo Abel Luciatti en un gran primer tiempo del Matador, que luego se dedicó a aguantar.
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El Matador tuvo unos primeros minutos de orden y presión alta que complicaron la salida de Boca y lo forzaron a cometer errores, sobre todo por el lado de Nicolás Valentini y Marcelo Sarachi. Pese a eso, a los de Victoria les faltaba claridad con la posesión y no pudieron encontrar ataques claros que inquietaran a Sergio Romero. Un disparo de Alexis Castro que se perdió por arriba del travesaño y un cabezazo de Tomás Badaloni que salió desviado luego de un córner fueron lo más destacado de los primeros 20 minutos. El local, por su parte, sólo generó una pelota parada sobre la izquierda que Marcelo Weigandt no pudo impactar y el arquero Santiago Rojas amortiguó con seguridad.
Más allá de no tener oportunidades claras, Tigre estaba más ordenado en el mediocampo, con mayor enlace de juego entre la defensa y Badaloni, y con más tranquilidad para generar juego de tres cuartos hacia adelante con Lucas Menossi, José Paradela y Castro, que pisaron varias veces el área de Boca. El Xeneize sólo apelaba a algún arresto individual de Exequiel Zeballos, que complicó al tándem Martín Garay-Robert Rojas.
A los 37, un muy buen centro de Aaron Molinas desde el tiro de esquina encontró la cabeza de Abel Luciatti, que le ganó la marca a Darío Benedetto y la puso de pique al piso junto al palo izquierdo de Romero, que no tuvo nada para hacer. Era el 1 a 0 para Tigre que justificaba en el resultado el buen trabajo hecho en la primera mitad.
Así se fue el primer tiempo. Los dirigidos por Lucas Pusineri fueron superiores en el duelo que Boca suele plantear en la mitad de cancha, mantuvieron la paciencia y además tuvieron premio. Badaloni, Molinas y Paradela, entre los puntos más altos del Matador, que en líneas generales tuvo un gran desempeño.
La segunda etapa arrancó con el local más punzante volcado al ataque y con Tigre buscando la pelota. El Matador tuvo la chance de estirar la ventaja: una jugada por la derecha entre Menossi y Castro terminó con centro para Badaloni que no pudo cabecear cómodo. Paradela capturó el rebote en el punto del penal, pero la agarró de aire con la zurda y se fue por arriba. Un minuto después, Castro también desperdició una clara al quedar de frente al arco tas una corrida por la izquierda que definió muy flojo ante Romero.
Boca tomó el control del encuentro casi en su totalidad y Tigre entregó la pelota, replegándose y esperando poder lastimar con alguna transición rápida de defensa a ataque. Edinson Cavani tuvo dos oportunidades para empatar: una con un tiro libre que se fue lejos y una pelota en el área chica que no pudo conectar después de un centro desde la izquierda de Zeballos. El Chango también complicó a Santiago Rojas con una pelota parada que el uno Matador debió enviar al tiro de esquina.
Con imprecisiones y sin juego colectivo, los de Victoria resistían los embates del Xeneize, que por las bandas apelaba a los centros pero no era contundente en la finalización de las jugadas.
Prolijo, sólido e inteligente, el Matador cerró un gran partido. Hizo todo bien en el primer tiempo y se dedicó a defender en el segundo, también bien. Partido completo y regreso al triunfo en una cancha muy complicada para poder empezar el proceso de Pusineri con tres puntos en el bolsillo que ayudan a trabajar con tranquilidad.
El próximo encuentro Tigre recibirá a Estudiantes de La Plata en Victoria, con día y horario a confirmar, luego de la fecha FIFA.
