Tigre es implacable en el José Dellagiovanna. Lleva cuatro partidos como local y ganó los cuatro. Esta vez la víctima fue Banfield, a quien venció por 1 a 0 con gol de Ignacio Russo. El Matador, con este resultado, se sube al pelotón de los de arriba en la Zona A.
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Con el cambio obligado de Garay por Ortega, Tigre se presentó en Victoria sabiendo que si ganaba se subía a la punta. A diferencia de los últimos partidos, el Matador no pudo destrabar el marcador en los primeros 20'. El partido tardó mucho en armarse y la posesión fue repartida. Dos equipos ordenados que se estudiaron mucho en los primeros minutos.
Salvo por un disparo de lejos de Saralegui, no había pasado nada en el primer tramo. Tigre buscaba mover la pelota y encontrar libre a Jabes y Banfield lastimar a espaldas de un Banegas amonestado, pero poco y nada en los 25' iniciales.
En el tramo final empezó a haber un poco de ida y vuelta. Banfield manejó un poquito más la pelota pero el Matador llegó con más peligro. Sanguinetti le sacó a Cabrera sobre la línea la más clara a los 30' y lo que hubiese sido el 1-0 del conjunto local.
Tigre empujó más y mostró un poco más de ideas pero le costó desordenar a Banfield y no tuvo el cambio de ritmo que le pedía el partido. El Taladro marcó el 1-0 en la última en un contraataque pero el VAR lo anuló luego de que Arasa omitiera una falta grosera sobre Scipioni. Al descanso 0-0.
Sin cambios para el complemento y a los 13', Tigre tuvo la más clara de todas. No pasaba nada hasta que Russo apareció solo en el área y le dio mordido. Por suerte, un minuto después volvió a aparecer sin marca y tras un gran pase de Saralegui, estampó el 1-0 a los 15 minutos.
El Matador se acomodó mucho mejor después del gol y pasó a manejar la pelota durante largos ratos en campo contrario. Cuando Banfield intentó responder, se encontró con un Zenobio enorme. Para los 25' ya estaba Medina en cancha para rearmar y contener mejor el mediocampo (salió Romero).
Banfield dominó en el tramo final por la lógica de ir a buscarlo pero jamás volvió a inquietar a Zenobio. Tigre descansó en Ramírez y Oviedo, que oxigenaron bien los ataques, y se quedó con otro triunfo de local. El cuarto al hilo para llegar a 15 puntos y subirse a la cima de la tabla de posiciones junto a Argentinos y Estudiantes. El Matador va y va.
