El hincha de Tigre volvió a sonreír. Con un equipo en lo todavía muy lejos de las expectativas, en lo futbolístico y en lo numérico, esta noche ganó, sumo de a tres, y volvió a gritar un gol de mítico Chino Luna.
Un primer tiempo en donde Tigre tomó la iniciativa y trató de mover el balón de un lado a otro en busca de encontrar el espacio para atacar, mientras que Rafaela buscaba recuperar rápido e ir directo sin tanta elaboración pero con agresividad. Por momentos lo lograron y por momentos no.
El Matador avisó de pelota parada con un cabezazo de Moiraghi y con Morales de tiro libre a lo Maradona en Napoli sin tanto recorrido, la diferencia es que Cachete le dio al travesaño. El Matador también sufrió pero Marinelli sacó varias e incluso Larrondo sacó una de la línea.
El detonante fue la expulsión de Blondel en la visita que le permitió a Tigre tener un mayor control y Rafaela un esfuerzo considerable tratando de cubrir el hueco del jugador menos. Más allá de esto, el gol llegó desde los 12 pasos.
En una jugada polémica, el árbitro cobró agarrón al Marciano Ortiz dentro del área y quien tomó la decisión de ejecutarlo fue Dening quien pateó fuerte abajo a la derecha del arquero para la locura del José Dellagiovana.
En el segundo tiempo, el equipo de Gorosito aprovechó el hombre de más y se la hizo pasar realmente mal a Rafaela. Se juntaron los que sabían e hicieron desparramar a la visita por todo el campo de juego. Cavallaro tuvo varias ocasiones para marcar pero increíblemente falló todas. Larrondo lo mismo. Pero parece que en Tigre hay un solo hombre destinado al gol.
Carlos el Chino Luna ingresó y en la primera que tocó, la mandó a guardar luego de una gran jugada colectiva. Gol del Chino y partido liquidado. Hizo otro pero se lo anularon por offside. El Matador fue en busca del tercero, no se conformó pero hasta ahí se quedó.
Un triunfo fundamental de Tigre para no perderle pisada a Riestra, quien es el último en entrar al Reducido, y para reencontrarse a sí mismo luego de lo que fue la dura derrota ante Quilmes y todo lo que se habló en la semana. Un triunfo revitalizador.
