Tigre volvió a jugar un muy mal partido y cayó ante Central Córdoba en el Estadio Madre de Ciudades. Christian Ocampos hizo el único gol del partido.
Con un solo cambio respecto al partido con Vélez (el ingreso de Medina de punta en lugar de Alexis Castro), Tigre planteó un 4-4-2 en el Madre de Ciudades que de a poco empezó a dar frutos. En medio de un inicio parejo y equilibrado, Paradela con su rebeldía fue el que más buscaba romper con la monotonía. Con dos buenos giro puso a correr a Medina al espacio y logró una primera llegada clara que el ex Patronato dilapidó con un zurdazo mordido.
Tras un rato de posesión disputada y poca intensidad, Reniero tuvo la segunda clara para Tigre a los 22' con un derechazo que se fue por arriba del travesaño. Al igual que en el encuentro ante Vélez, al Matador le costaba mucho generar juego asociado y no tenía conexión entre volantes, por eso de a poco Central Córdoba se empezó a animar y lo puso incómodo al visitante.
Con jugadas simples (pelotazo a los delanteros descarga y remate), el local lo puso contra las cuerdas a Tigre y casi marca el 1-0 a los 37'. El paraguayo Ocampos aprovechó una respuesta defectuosa de Rojas y un offside milimétrico salvó al Matador de irse al descanso en desventaja, después de una primera parte tediosa y sin generar casi nada en ataque.
Para el complemento Pusineri mandó a la cancha a Lautaro Montoya en lugar de Prieto, amonestado y otra vez en bajo nivel. Puesto por puesto. Sin reacción alguna por parte de Tigre, Central Córdoba asestó el primer golpe a los 7' del segundo tiempo por intermedio de Christian Ocampos Domínguez y se hizo definitivamente dueño del trámite. A los dirigidos por Pusineri no se les caía una sola idea y los minutos pasaban.
Entraron Renzo López y Alexis Castro para ver si la ecuación podía cambiar, pero todo le seguía costando horrores a Tigre. Timidez en cada ataque, centros a la tribuna y el nerviosismo que ya había consumido a los jugadores, por eso para los 30' Central Córdoba se mantenía en su libreto, buscaba alguna contra y dejaba que Tigre se desesperara.
El Matador mostró un pequeño atisbo de empuje en los últimos 15 minutos, pero en ningún momento encontró los caminos ni estuvo cerca de empatar, salvo por un remate al travesaño de Paradela (el único aprobado). Central Córdoba resistió y se consumó una nueva derrota para el equipo de Pusineri.
Con este resultado, Tigre permanece anteúltimo en su zona con solo seis puntos de 24 posibles y extiende su mal presente, que se volvió alarmante. Apenas hizo dos goles en ocho fechas, está a tres puntos del último equipo que desciende por tabla general y podría quedar más cerca si sus competidores directos ganan.
