El equipo de Alfaro, que no contará con el Chino Luna, enfrentará mañana desde las 20.00 al Granate en el sur.
Después del celebrado triunfo contra Chicago, llegó el momento para que Tigre empiece a definir para qué está en el torneo. El partido anterior fue sin dudas el más importante por la historia, porque la gente lo vivió de manera especial y así lo sintió también el plantel. Pero es indiscutible que la jerarquía de este Tigre supera con creces a la pobreza de un Chicago que todavía no conoce la victoria desde que ascendió. Luego de algunos partidos, a priori, difíciles como Central en Rosario, donde el equipo aún sin rodaje mereció mejor suerte y fue perjudicado por el arbitraje. O como Colón en Santa Fe, donde el Matador empezó a cambiar la historia de visitante logrando una victoria en una cancha siempre esquiva. Y cómo olvidar el paseo que le dio el equipo de Alfaro a Estudiantes, acá en el Coliseo, con un 2 a 0 generoso que pudo haber sido mayor si los delanteros hubiesen estado más precisos.
Pero ahora tendrá sin dudas el partido más difícil desde lo futbolístico desde que comenzó el torneo, y será sin dudas una bisagra. Lo será porque si bien Lanús está justo en la mitad de la tabla con 15 puntos, es un equipo sólido, con una idea clara de juego, y que no suele dejar puntos en su cancha. Pero también lo será porque Tigre, que jugará el segundo partido de la fecha, en caso de ganar se sumaría a los escoltas del puntero Boca, y quedaría tan solo a 3 unidades de la punta. Sin duda Alfaro armó un equipo para sumar mucho, y pensar en llegar a las últimas instancias de la Copa Sudamericana el siguiente semestre. Sin embargo le rendimiento superlativo de los referentes, sumada a la rápida adaptación de los refuerzos y a las sorpresas que vienen dando juveniles como Castro y Menossi; hicieron que este equipo y su gente se ilusionen con volver a dar pelea arriba.
Para este partido tan importante, el técnico tendrá el desafío de reemplazar al goleador y capitán del equipo. Es que el Chino fue amonestado y llegó a la quinta en el triunfo por 2 a 0 del domingo, frente a Chicago, donde el 7 fue la figura indiscutida. Los últimos 3 goles del equipo los hizo el mismo jugador. Alfaro deberá reemplazar este peso en al red, y para hacerlo pica en punta el colombiano Sebastián Rincón. Si bien tuvo muchos minutos entrando en el segundo tiempo, ya es momento para el cafetero de demostrar que lo que muestra a cuentagotas en el complemento, puede profundizarse si se le da la oportunidad. Este viernes tendrá esa chance, y esperemos que no la deje pasar. Porque Tigre no debe dejar pasar la suya, la de definitivamente prenderse en la pelea de un campeonato que será largo, y que no ganará el más rápido, sino el que mejor sepa correr.