¿Qué pasa con la toma de terrenos en la estación Victoria?

En agosto, un grupo de familias ocupó un terreno dentro de un predio que pertenece a Trenes Argentinos y que tiene una historia de ocupación de más de 50 años. Por la toma, el gremio ferroviario mantiene un paro hace 10 días.

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Uno de los emergentes sociales que ha alcanzado mayor notoriedad y presencia en la agenda mediática en las últimas semanas es el de las tomas de tierras en el conurbano. En la zona norte, la toma de un terreno junto a la estación del ferrocarril Mitre, en la localidad de Victoria, ha tenido un gran impacto, no tanto por su dimensión, ya que son tan solo un pequeño grupo de familias, sino por la cercanía a barrios de clase media y el paro que mantiene sin servicio a ramales del ferrocarril, entre ellos el Tigre-Retiro, que es una de las principales arterias de conexión dentro de la región y de acceso a la ciudad de Buenos Aires.

El domingo 23 de agosto unas 6 o 7 familias se asentaron en uno de los extremos del denominado “barrio ferroviario”, tierras fiscales del Estado Nacional, bajo la gestión de Trenes Argentinos, que se extienden entre las vías del ferrocarril Mitre y la calle Martín Rodriguez, y que tienen una larga historia de ocupaciones. 

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La porción tomada en esta ocasión es un sector que no excede los 50x15 mts, que está delimitado por un alambrado pre-existente, ya que según informaron desde la empresa Trenes Argentinos, ese espacio es utilizado para depositar materiales, que luego son cargados para distintas tareas de mantenimiento. 

A partir de la toma, el gremio ferroviario determinó un paro que mantiene interrumpido el servicio de los ramales Tigre-Retiro y Victoria-Capilla del Señor. La ocupación del terreno no se encuentra sobre las vías y no afecta directamente la operatividad de los servicios, pero podría, según señalaron desde la empresa, interferir en la playa de maniobras vinculadas a acciones de mantenimiento.

El barrio ferroviario y una historia de ocupación que lleva más de 50 años

El déficit habitacional y las tomas de tierras no comenzaron en la Argentina con la pandemia y la historia del barrio ferroviario es una muestra de esto. Las primeras familias que se asentaron en el lugar lo hicieron en el año 1969. Hasta el año 2018, según surge del censo realizado en el marco del Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap) al que pudo acceder QUE PASA, había más de 100 familias que habían tomado un espacio de este predio lindero a las vías del Mitre en Victoria, casi en su totalidad de trabajadores ferroviarios. 

En el año 2018 hubo una toma importante de tierras en el predio, donde se asentaron entre 30 y 40 nuevas familias. Este grupo no estaba vinculado a trabajadores ferroviarios, lo que generó en su momento muchas tensiones y situaciones de violencia entre los antiguos moradores y los recién llegados. 

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El 23 de agosto de 2020, en el marco de la pandemia, 7 nuevas casillas, se asentaron en un sector contiguo al asentamiento de la toma del año 2018. 

Arroyo Salgado rechazó los pedidos de desalojo

Las tierras ocupadas pertenecen al Estado Nacional, por lo cual, no tienen injerencia sobre ellas ni el municipio de San Fernando, ni el gobierno provincial. Fue la empresa estatal Trenes Argentinos quien inició una causa por usurpación en el Juzgado Federal N°1 de San Isidro a cargo de la jueza Sandra Arroyo Salgado. 

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Trenes Argentinos está gestionada por referentes del massismo. En medio del debate mediático sobre las tomas de tierra, Sergio Massa no sólo habló explícitamente de la toma en Victoria, sino que fue uno de los referentes del Frente de Todos que tuvo posiciones más duras en relación a las ocupaciones, sugiriendo la posibilidad de cortar toda asistencia social a quienes tomen tierras. También el intendente de San Fernando, Juan Andreotti, se posicionó exigiendo a Arroyo Salgado que intervenga (VER NOTA). 

Pero la jueza federal, en una resolución, consideró a la toma de tierras como un conflicto de resolución política y no judicial, vinculado a la situación habitacional de las familias, e instó a las autoridades nacionales, provinciales y municipales que “a la brevedad posible articulen las medidas de acción que resulten menester y se encuentran dentro de su competencia funcionales, para solucionar con urgencia la situación habitacional de quienes residen en el denominado 'barrio ferroviario', evitando la judicialización de cuestiones que acorde con la unánime opinión de todos los actores conciernen al ámbito político y se verifican con sus más y sus menos desde hace varias décadas”.

 Esta resolución fue apelada por Trenes Argentinos ante la cámara federal. 

El paro en el tren Mitre

Cuatro días después de la toma, el 28 de agosto, el gremio de La Fraternidad determinó un paro que ya lleva 10 días de interrupción del servicio de dos ramales de la línea Mitre: Retiro-Tigre y Victoria-Capilla. 

El gremio denunció “constantes hechos de inseguridad contra trabajadores” a pesar de la fuerte presencia policial que impide el ingreso y el egreso de personas al sector ocupado. También aseguraron que no se levantaría el paro hasta que se produzca un desalojo.

La semana pasada, surgió la información de un principio de acuerdo entre la empresa, el gremio y los ocupantes: la construcción de un muro para separar el sector de la nueva ocupación de la playa de maniobras.

Desde Trenes Argentinos confirmaron a este medio la versión, pero aseguraron que con la construcción de este muro se buscaba permitir la continuidad del servicio del ferrocarril, mientras se continúan las acciones judiciales reclamando el desalojo del predio. Hasta este lunes, el principal transporte público de conexión entre el conurbano norte y la Ciudad de Buenos Aires, continuaba sin servicio. 

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