Trabajadores de la fábrica Bed Time ubicada en Tigre denunciaron que desde la empresa de colchones se busca realizar una reducción de la jornada laboral, recorte de salarios y despidos, además de condicionar el pago de sueldos adeudados a conseguir un acuerdo con los trabajadores en estas medidas que en las que buscan avanzar como consecuencia de la crisis generada por el coronavirus.
Mediante un comunicado emitido tras una asamblea realizada este lunes 20 de abril en la planta de la localidad de Ricardo Rojas, afirmaron que desde la empresa se les plantearon dos propuestas: la primera supone una reducción de la jornada laboral y una reducción de los salarios del 50%; la opción a la reducción de sueldo es el despido del 50% de los trabajadores con una indemnización al 50% del básico.
Además señalaron que la empresa condicionó el cobro de los haberes adeudados a la aceptación de alguna de las propuestas.
"El día lunes 6 de abril, a través de una decisión administrativa del gobierno, la producción de colchones pasó a ser esencial. La empresa nos convocó a las tareas planteando que tenía un pedido para colaborar con el distrito de Tigre, pero la realidad que durante estas semanas se están produciendo productos premium", contó Lucas Sánchez, delegado de los trabajadores y señaló que "hoy se están trabajando jornadas de 6 horas cada turno".
En este sentido, indicó que, al pertenecer a la Unión Obreros y Empleados Plásticos (UOYEP) se enteraron que en otras fábricas similares, como Piero, "se está trabajando en grupos de 20 personas por semana y la empresa abona la semana que trabajás al 100 % y las semanas que no trabajas al 70%".
"El día de ayer tomamos conocimiento de que el gremio firmó un acuerdo con la Cámara Empresaria, para que los trabajadores que no están en actividad se les pague el 70 %", explicó Sánchez y criticó que "la empresa pasa por arriba del decreto presidencial que prohíbe los despidos por 60 días, pero se vale del mismo para reducir los salarios".
Por este motivo, los trabajadores reclaman no sólo "la inmediata regularización de los haberes adeudados y las diferencias de las anteriores quincenas, emplazando a la empresa a dar respuestas en 24 horas" sino también el rechazo de las propuestas de la empresa, denunciando a su vez "que se trata de una provocación hacia sus trabajadores".
"Repudiamos enérgicamente la extorsión que pretende llevar adelante cuando platea que regularizará los haberes después de la firma de cualquiera de sus planteos”, enfatizó Sánchez, y cerró: "Vamos a llevar adelante todas las medidas que sean necesarias para reclamar legalmente la regularización del salario."