Se pudo ganar, claramente. Todavía uno se agarra la cabeza y se pregunta cómo no fue gol la jugada de Alexis Castro y por qué no definió de derecha. Pero tranquilos, esto recién comienza y hay varios puntos a analizar que, pensando en frío, invitan a tener fe. Tigre fue otro al que se vio en el 2015, comenzó el partido decidido a atacar, pero no apurado. Es verdad que le faltó posesión, pero cada vez que tuvo la pelota, lo hizo con criterio y llegó con claridad. Sobre todo en el primer tiempo cuando se vio la mejor versión. Pittinari y Menossi hicieron buena dupla, fueron el eje de todas las pelotas. Y si a esa línea se le suma Wilchez unos metros más adelante, y no por izquierda, se generará un triángulo más que interesante para lo que viene.
La defensa, que tanto preocupó, tuvo un buen rendimiento a pesar de ser casi nueva. Marín no desentonó y Erramuspe acertó más de lo que erró. Cuando se sumen Galmarini y Papa (el único lateral por izquierda natural que hay) va a ser otra cosa. Hay material de sobra. Y también una idea. Recién pasaron noventa minutos de campeonato y se jugó mejor que el rival, asi que hay que esperar y tener fe.
Párrafo aparte a Sebastián Balmaceda, proyecto del club que tuvo un lindo debut demostrando que no le pesa la camiseta. Ojalá sea el primero de varios debuts de los chicos producto de las inferiores como Fernando Redondo. Y además cuentan con la confianza del DT. Por eso, y mucho más, yo confío ¿Vos también confías?