Un policía bonaerense y un sargento del Ejército resistieron un asalto a los tiros y mataron a un presunto delincuente e hirieron a otro cuando iban a concretar la compra de un vehículo, pactada previamente previamente por de redes sociales.
El hecho fue descubierto cuando los dos sospechosos ingresaron baleados al hospital Eva Perón de dicho partido de la zona oeste del conurbano. Según las fuentes policiales, unos de los heridos arribó ya fallecido, mientras que el otro quedó internado con un tiro en el tórax. El fallecido fue identificado por la policía como Nicolás Adrián Díaz (27), quien presentaba un balazo en el abdomen.
Ante esta situación, personal de la comisaría 4° de Merlo comenzó a investigar lo sucedido y determinó que poco antes se había producido un enfrentamiento armado en las calles Diesel y Soler, de la localidad de Libertad.
Las fuentes señalaron que hasta allí llegaron un oficial de la policía bonaerense y un sargento del Ejército, ambos vestidos de civil, para concretar la compra de una camioneta Volkswagen Amarok blanca, pactada previamente por redes sociales. En esas circunstancias fueron sorprendidos por tres delincuentes con intenciones de robo, por lo que se resistieron a los tiros, y los asaltantes huyeron en un Renault Sandero.
Los voceros señalaron que los efectivos asaltados denunciaron lo ocurrido ante el personal de un móvil policial del Comando de Patrullas (CP) que se encontraba en el cruce de las calles Cañada de Ruiz y Vergara de Morón. Los pesquisas creen que tras el tiroteo, el conductor del Sandero abandonó a Díaz y al otro herido en el hospital.
El herido de bala cuenta con antecedentes por "amenazas, resistencia a la autoridad, tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil, robo agravado por el uso de arma no habida y violación de domicilio", indicaron las fuentes policiales.
El hecho es investigado por el fiscal Sergio Di Leo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 del Departamento Judicial de Morón, que dispuso la aprehensión de Juárez y una serie de diligencias a cargo de Gendarmería Nacional Argentina (GNA).
Los peritos realizaron las pruebas de dermotest en las cuatro personas involucradas y secuestraron los dos vehículos utilizados y las armas de los efectivos. A su vez, la Auditoría General de Asuntos Internos (AGAI) de la policía bonaerense no adoptó temperamento alguno para el efectivo de la fuerza asaltado.
