Mario César Martínez, de 53 años, es vecino del barrio San Rafael en San Fernando y fue dado de alta de coronavirus tras haber estado internado en la terapia intensiva del hospital municipal San Cayetano.
Luego de dos meses de internación con uso de respirador, Mario tuvo que ser sometido a una traqueotomía para poder seguir con vida. Se retiró del establecimiento aplaudido por el personal médico, administrativo y de seguridad, y se reencontró con su familia.
De vuelta en su casa y junto los suyos, Martínez contó su experiencia: “Durante el tiempo que estuve en la terapia intensiva valoré mucho la atención del personal médico, las enfermeras me trataron excelente, me daban todo lo que necesitaba. El primer mes la pasé bastante mal con la enfermedad, tuve que usar respirador y me tuvieron que hacer una traqueotomía para poder vivir.”
“El Hospital Municipal me salvó la vida. Lo único que puedo decir a la gente es que tenga esperanza y que se cuide porque es una enfermedad muy fea. Agradezco inmensamente el apoyo de mi familia”, expresó.
En tanto, su hermana Patricia comentó que el 1 de julio comenzó con síntomas. “Hemos pasado momentos difíciles, los partes eran muy duros, pero por suerte encontramos contención en cada médico que nos ha llamado y nos han acompañado en nuestro dolor. Al mes de internación me llama el médico y me dice que le tenían que hacer una traqueotomía para que pueda seguir respirando, habían intentado todo y la autorización era nuestra decisión, nosotros no dudamos ni un segundo”.
“Mario pudo salir adelante y estamos muy agradecidos con todo el equipo del Hospital Municipal porque la atención fue impresionante. Les decimos a los vecinos que es muy importante cuidarse, la responsabilidad es de cada uno para cuidar al otro”, finalizó emocionada.
Por último, el secretario de Salud Pública, Marcelo Campos, visitó a la familia y manifestó que “es una alegría poder dar una buena noticia en este momento tan crítico donde todos los argentinos la estamos pasando muy mal, poder traer un mensaje de aliento y esperanza y verlo recuperado después de meses de haber pasado por terapia intensiva, nos llena de felicidad”.