Finalmente, después de 8 años de espera, la justicia condenó a Daniel Lagostena, por el asesinato de su pareja de Érica Soriano, joven vecina de Villa Adelina, quien está desaparecida desde agosto de 2010.
Pero recién será el próximo viernes cuando se den los fundamentos de la sentencia y la cantidad de años de prisión que recibirá el condenado.
Lagostena llegó al acusado de "homicidio simple en concurso ideal con aborto en contexto de violencia de género".
Érica Soriano, estaba embarazada de dos meses cuando fue vista por última vez con vida, el 20 de agosto de 2010. Por el caso, Lagostena permanece detenido desde mayo de 2016.
Las sospechas sostenidas la fiscal Marina Rocvich fueron que Lagostena mató e hizo desaparecer a su pareja contando con la complicidad de personas vinculadas a casas crematorias, con las que tenía contacto ya que su familia es dueña de una casa velatoria.
De acuerdo con lo que se pudo probar en el debate, el día de su desaparición Erica Soriano asistió al ginecólogo y regresó por la noche a la casa de la pareja en Lanús. Una amiga de Érica declaró haber hablado esa noche con ella y advertir que había tenido una discusión con su pareja.
También se estableció que en la casa de Lanús se encontraba una tercera persona no identificada que llamó a una pizzería. Cerca de la medianoche, Lagostena intercambió varios mensajes con su sobrino, Diego Poublán, de 25 años.
Luego, se pudieron advertir seis llamadas, cerca de las 5 del día 31 entre Lagostena y el teléfono de la madre del joven, primero ubicado en la Costanera Norte y luego en Lanús. A la mañana siguiente, los familiares de la joven intentaron comunicarse con ella en forma infructuosa y Lagostena les dijo que había salido hacia la casa de ellos, en Villa Adelina.
La familia de la joven, ante sospechas motivadas por una mala relación de la pareja, fueron a la casa de Lanús con la Policía y encontraron la ropa que el hombre dijo que su pareja tenía puesta en el momento de salir, el ácido fólico que tomaba por su embarazo y todas sus pertenencias, con excepción del celular. Otra situación sospechosa es que la chimenea de la casa estaba prendida, pese a tratarse de un día que no era frío, y además encontraron restos de una bombacha.
En su alegato la fiscal solicitó una pena de 25 años de prisión. El viernes se conocerá la cantidad de años de prisión que deberá cumplir Lagostena.