Tigre ya tiene siete refuerzos abrochados y aún no se retira del mercado de pases. A la espera de la oficialización del pase de Romeo Benítez, Sebastián Domínguez y la dirigencia trabajan para traer, en principio, dos futbolistas más.
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En primer lugar, el Matador traerá sí o sí un arquero antes de que cierre el libro de pases en el fútbol local (el jueves 22 de agosto a las 20.00). Con la salida de Matías Tagliamonte, el cuerpo técnico solicitó el arribo de un guardameta para competir con Felipe Zenobio. Por ahora no hay ningún nombre cerca y siguen evaluando distintas opciones.
Por otro lado, también es probable que arribe un defensor central para fortalecer la competencia en esa zona. Rolando Ortiz, defensor paraguayo que estuvo a prueba, finalmente no va a firmar su contrato y por eso Domínguez necesita un defensor más para llegar a seis centrales en el plantel.
No se descarta alguna baja más de acá a que cierre el mercado (Nicolás Contín y Sebastián Medina podrían irse), pero a priori los que están son los que se quedarán hasta fin de año.
